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Para los estudiantes universitarios, tomar un año sabático podría ser la mejor opción durante el coronavirus

Janak Bhakta, 17, of Tustin is taking a gap year.
Janak Bhakta, de 17 años, de Tustin, esperaba viajar internacionalmente para su año sabático, pero ahora se está uniendo a un programa de conservación.
(Jason Armond / Los Angeles Times)
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Janak Bhakta, de 17 años de Tustin, tenía grandes planes para 2020. Quería pasar tiempo lejos de lo académico para aprender, crecer y madurar viajando por el mundo. Luego, la pandemia de coronavirus golpeó y convirtió esos planes en polvo.

“El plan ideal era viajar internacionalmente, pero obviamente eso no va a suceder”, dice Bhakta sobre su año sabático. Llenó solicitudes para Outward Bound Costa Rica y NOLS Baja, dos organizaciones líderes al aire libre y de liderazgo, pero ambos programas fueron cancelados debido a restricciones de viaje y problemas sanitarios.

Bhakta aún pudo encontrar la combinación perfecta con el High Mountain Institute con sede en Colorado, que coloca a los participantes en parques nacionales para ayudar en los esfuerzos de conservación locales. Este nuevo plan cubrirá sólo los primeros meses del viaje de un año de Bhakta.

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“Eso es lo que haré para el otoño e invierno”, dice. “La primavera todavía está en veremos”.

Bhakta está lejos de ser el único en querer tomar un año libre de la educación superior. A medida que más y más colegios y universidades se mueven a la enseñanza en línea debido al coronavirus, el atractivo de un año libre también ha ido creciendo. Una encuesta de abril encargada por el Consejo Americano de Educación muestra que uno de cada cinco estudiantes universitarios no estaba seguro de sus planes para volver a inscribirse en la escuela para el otoño. Aunque tomarse un año sabático no es una prioridad en las listas de tareas de los jóvenes estadounidenses, el clima actual de COVID-19 ha dejado a muchos preguntándose si un año libre de cursos académicos sigue siendo una opción.

Janak Bhakta, 17, of Tustin poses for a portrait in his backyard.
Janak Bhakta se unirá al High Mountain Institute con sede en Colorado, que coloca a los participantes del año sabático en parques nacionales para ayudar en los esfuerzos locales de conservación.
(Jason Armond / Los Angeles Times)

Esto es lo que necesitan saber los interesados en distanciarse socialmente de la universidad durante un año.

¿Qué es un año sabático?

Como Ethan Knight, un alumno de año sabático y director ejecutivo de Gap Year Assn., una organización sin fines de lucro y de establecimiento de normas para programas de año sabático en Portland, Oregón, lo explica, un año sabático es un “semestre o un año de aprendizaje experiencial típicamente tomado después de la escuela preparatoria y antes de la educación universitaria para profundizar la conciencia práctica, profesional y personal”.

Según Knight, un número creciente de personas está buscando el “año sabático” en línea como una alternativa al regreso a la escuela en este momento.

“Estábamos viendo un aumento del tráfico del 300% en ciertas páginas y, en términos generales, un incremento de aproximadamente el 150% en todo el sitio”, dice Knight sobre las búsquedas en el sitio web de la Gap Year Assn., gapyearassociation.org.

Sin embargo, quiere dejar una cosa clara: que su propia definición de año sabático puede ser demasiado rígida. Él dice que un año sabático no tiene que tomarse tan literalmente como un compromiso de un año.

“No es igual para todos”, comentó Knight, y señala que los jóvenes pueden pasar unos meses, un semestre o un año o más en esta experiencia.

“Al año sabático se le considera una cosa, pero a mí me gusta definirlo más bien como una receta”, dice, y agrega que un buen año sabático tiene cuatro ingredientes básicos: un montón de voluntariado saludable, un poco de experiencia en pasantías, una carrera de trabajo remunerado y una pizca de tiempo “radical libre”.

“Deje un poco de espacio para lo desconocido”, sugiere, “porque, en parte, lo que está haciendo es explorar si esto que le encanta hacer podría ser lo que hará el resto de su vida”.

Además, hay una cosa más importante para tener en cuenta. No tiene que ser un adolescente para tomar un año sabático. Si siente que necesita una transición, sin importar en qué etapa de la vida se encuentre, es probable que haya un programa para usted. Simplemente pregúntele a Samantha Warfield, representante de la Corporación para el Servicio Nacional y Comunitario, que dirige AmeriCorps, el programa que es esencialmente sinónimo del año sabático estadounidense.

“No necesariamente debe tener 18 años o ser un estudiante universitario para participar en AmeriCorps”, dice ella. “Tenemos muchos programas para todos”.

¿Mi escuela permitirá un año sabático?

Hay una advertencia importante que los estudiantes y los padres deben considerar antes de comprometerse con un año sabático, y es si un colegio o universidad lo permitirá.

Este año, muchas escuelas están quitando la opción de diferir, o han agregado reglas en profundidad para los aplazamientos de estudiantes de primer año. Cal State Fresno, por ejemplo, permitirá que los alumnos de primer año entrantes difieran sus estudios hasta la primavera de 2021, pero a los estudiantes no se les permite tomar clases de colegio o universidad en otras escuelas durante este tiempo. Si lo hacen, su aplazamiento se anulará, y esas personas tendrán que volver a presentar la solicitud como estudiantes transferidos.

La Universidad del Sur de California (donde, con plena divulgación, este reportero trabaja como profesor adjunto) es un poco más estricta. Como explica su sitio web de admisión de pregrado, “en casos específicos relacionados con problemas médicos, obligaciones religiosas o servicio militar / nacional requerido, pueden existir aplazamientos de admisión. Sin embargo, las solicitudes de aplazamiento por otros motivos generalmente no se otorgarán”.

¿Qué programas hay disponibles?

Aunque podría ser que este año no sea posible realizar una búsqueda de autodescubrimiento en todo el mundo, todavía hay opciones sólidas disponibles para aquellos que deseen tomarse un año sabático.

“Creemos que todos los estadounidenses deberían tener la oportunidad de servir”, dice Warfield. “Si decide dar un año de servicio a través de algo como AmeriCorps, tenemos algo para usted”.

Esa lista de programas disponibles a través de su organización incluye el conocido AmeriCorps NCCC, a través del cual los participantes realizan trabajos tales como despejar senderos en parques nacionales o construir viviendas para los necesitados. También incluye AmeriCorps State y National, que actúa como el “proveedor del servicio nacional”.

Aquellos que buscan activamente programas de servicio o trabajo pueden explorar entre cientos de opciones en el sitio web estatal y nacional de AmeriCorps. Los programas abiertos actualmente incluyen voluntarios de fotografía en Vermont y voluntarios de análisis de datos en Washington, D.C., así como mentores para estudiantes de preparatoria en el centro de Texas. Aquellos interesados también pueden buscar programas que sigan aceptando solicitudes a través del portal de búsqueda de Gap Year Assn.

Sin embargo, eso está lejos de ser una lista exhaustiva de opciones. Estudiantes como Mateo Bolado de Berkeley, California, están explorando opciones de carrera a través de la programación de pasantías en línea y en persona.

“A medida que más y más de mis amigos decidían ir a la universidad, simplemente los seguí”, dice Bolado. “Pero tan pronto como llegué a la escuela, sentí un profundo arrepentimiento”.

Antes de que se desatara la pandemia de coronavirus, Bolado sabía que quería tomarse un tiempo libre para descubrir más sobre sí mismo y su futuro potencial. Actualmente está trabajando como pasante virtual para una empresa de biotecnología y explorando opciones para la primavera, incluidos los viajes globales y los programas de inmersión lingüística.

“El COVID sólo hizo que me sintiera más seguro en la decisión que tomé”, dice el joven de 19 años contagiosamente seguro de sí mismo.

¿Puedo ganar dinero?

Este mes, el Banco de la Reserva Federal de Nueva York publicó un análisis que decía que tomar un año sabático podría costar a las personas $90.000 de potenciales ingresos de por vida al retrasar la universidad, además de un año de sus carreras. Sin embargo, el análisis no tuvo en cuenta los beneficios sociales y mentales de un año sabático. Tampoco tuvo en cuenta el hecho de que aún puede ganar dinero o ganar créditos universitarios mientras toma un año sabático.

Knight y Warfield quieren dejar en claro que tomar un año sabático para viajar, aprender o servir no está reservado para la élite que puede pagarlo. Es una oportunidad para todos, y las personas también pueden encontrar vivienda y trabajo remunerado. Como explica Warfield, hay varios programas de AmeriCorps que vienen con estipendios mensuales. Ese dinero extra puede sumarse a la vivienda gratuita y una remuneración diaria en alimentos.

Cuando las personas completen su año sabático de servicio, también serán elegibles para un Premio de Educación Segal AmeriCorps, que se puede usar para pagar los costos calificados de educación superior. Eso podría incluir escuelas tradicionales de dos o cuatro años o programas de certificación, o el premio podría utilizarse para pagar la deuda de préstamos estudiantiles.

Más allá del efectivo, los participantes del año sabático también pueden obtener créditos universitarios. El Gap Year Assn. trabaja con organizaciones que califican a través de su estricto programa de acreditación para ofrecer créditos universitarios en la Universidad Estatal de Portland en Oregón. Según Knight, los estudiantes pueden obtener hasta 12 créditos semestrales durante su año sabático, según el programa que elijan.

¿Qué ganaré realmente?

Pregúntele a cualquiera que haya tomado un año sabático sobre su experiencia, y es probable que enumere una lista de aspectos positivos. Más allá de las anécdotas personales, hay datos sólidos para respaldar sus afirmaciones.

Según una encuesta realizada por Gap Year Assn. y la Universidad de Temple en Filadelfia, quienes participaron en un año sabático en general tuvieron tiempos más cortos para graduarse y promedios de calificaciones más altas en comparación con las normas nacionales. Estos resultados parecieron duraderos en la edad adulta.

¿Otro posible lado positivo de un año sabático? Según la encuesta, el 86% de los participantes en el año sabático informaron que están satisfechos o muy satisfechos con sus trabajos; el 63% comentó haber participado en el ciclo electoral de 2014; y el 89% informó participar en el servicio comunitario, todos superando ampliamente los promedios nacionales. Además, más del 80% de los participantes de la encuesta dijeron que recomendarían tomar un año sabático a alguien que lo esté considerando.

Los autores de la encuesta concluyeron que estos beneficios hacen imperativo que los programas de año sabático atraigan y recluten participantes más diversos. El sondeo encontró que la mayoría de sus participantes eran mujeres blancas, nativas de habla inglesa de familias con un ingreso familiar estimado en más de $100.000 al año. Además, el 35% de los participantes del año sabático asistieron a escuelas privadas.

La encuesta también encontró que los participantes del año sabático consideraron que “estar en un ambiente nuevo y diferente” es la parte más significativa de la experiencia. Bolado dice que fue primordial en su decisión de tomar un año sabático.

“En el viaje hacia la edad adulta, hay tanta ansiedad y preocupación”, dice, y señala que muchos de sus compañeros encuentran consuelo en el camino directo a la universidad con sus vidas un poco más planificadas. Para él, este es un año, a pesar del coronavirus, para ser más “maduro, curioso y estar motivado”.

“Me di un año para madurar y ser un poco más independiente”, dice, “y luego volver a la escuela con la mentalidad correcta”.

Para leer esta nota en inglés haga clic aquí

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