Un estudio de California sugiere que las infecciones por coronavirus podrían estar mucho más extendidas de lo que se cree
En las semanas transcurridas desde que el nuevo brote de coronavirus ha sofocado la vida diaria en Estados Unidos, los investigadores han luchado para evaluar la verdadera propagación del virus. Pero los resultados iniciales de un estudio del norte de California sobre los anticuerpos contra el coronavirus sugieren que ha circulado mucho más de lo que se pensaba anteriormente, según un informe publicado el viernes.
El estudio preliminar, realizado por investigadores de la Universidad de Stanford, estima que entre el 2.5% y el 4.2% de los residentes del condado de Santa Clara tenían anticuerpos contra el nuevo coronavirus en la sangre a principios de abril. Los anticuerpos son una indicación de que el sistema inmunitario de una persona ha respondido a una infección pasada.
Aunque el Condado había reportado aproximadamente 1.000 casos a principios de abril, los investigadores de Stanford estiman que el número real era entre 48.000 y 81.000, o de 50 a 85 veces mayor.
El condado de Santa Clara fue uno de los primeros focos de la pandemia del COVID-19 en California. Al tomar muestras de la sangre de 3.300 residentes del Condado y analizarla para detectar anticuerpos contra el coronavirus, los investigadores esperaban estimar la prevalencia del virus en la población.
Los análisis de sangre de anticuerpos, también conocidos como pruebas de serología, son distintos de los exámenes de diagnóstico utilizados para confirmar una infección activa.
Investigadores del Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles y USC lanzaron un estudio similar una semana después de que Santa Clara lo comenzó. Las autoridades dicen que harán públicos sus resultados iniciales el lunes.
Bárbara Ferrer, la principal funcionaria de salud pública del Condado, señaló que aunque el estudio de Los Ángeles tendrá cifras algo diferentes, “van a contar una historia similar. Y creo que la historia es... muchas más personas han sido infectadas con COVID-19 que aquellas que están siendo capturadas a través de nuestras pruebas”.
La discrepancia, dijo Ferrer, se debió al inicio lento de las pruebas de diagnóstico y al hecho de que muchas personas con pocos o ningún síntoma no pudieron hacerse la prueba.
Hay advertencias importantes a los hallazgos de Santa Clara. A diferencia del condado de Los Ángeles, donde los investigadores reclutaron una muestra aleatoria de participantes para reflejar la composición del Condado, el estudio del norte de California solicitó participantes de las redes sociales.
Como resultado, las mujeres blancas de 19 a 64 años estaban sobrerrepresentadas en el grupo de participantes, mientras que los latinos y los asiáticoamericanos estaban subrepresentados en relación con su participación en la población del Condado. Los investigadores trataron de adaptarse a este desequilibrio en su análisis.
Además, el informe de Stanford se publicó en un sitio web para compartir los primeros resultados de la investigación médica y aún no se ha examinado a través del proceso típico de revisión por pares.
Neeraj Sood, profesor en Price School of Public Policy de USC y autor del informe de Stanford, dijo que no le sorprendieron los resultados.
“No sabía cuál sería la magnitud, pero definitivamente esperábamos que hubiera más casos que los confirmados, dada la escasez de pruebas”, manifestó Sood, quien también es el investigador principal del estudio del condado de Los Ángeles.
Una conclusión clave del estudio del condado de Santa Clara es que una gran cantidad de personas infectadas con el coronavirus nunca muestran ningún síntoma, expuso Karin Michels, presidenta del departamento de epidemiología de Fielding School of Public Health de UCLA.
El hecho de que esas personas puedan ser contagiosas sin saberlo significa que es necesario mantener cierto nivel de distanciamiento físico para proteger a los ancianos y a aquellos con afecciones subyacentes que están en mayor peligro por la enfermedad.
“¿Cómo protegemos a los vulnerables, al tiempo que permitimos que otras personas que tal vez sean inmunes porque hayan sido infectadas y tengan anticuerpos vuelvan al trabajo? ¿Cómo se soluciona esto?”, cuestionó Michels.
La detección de anticuerpos puede ayudar a proporcionar una respuesta, dijo, pero sólo si una gran parte de la población puede hacerse la prueba.
Los estudios sugieren que quizá del 30% al 50% de las personas que contraen el nuevo coronavirus no tienen síntomas, expuso el Dr. Bob Wachter, presidente del departamento de medicina de UC San Francisco. En algún momento, dijo, tendrá que haber pruebas estratégicas de individuos asintomáticos.
Los funcionarios públicos y los investigadores apuntan cada vez más a las pruebas de anticuerpos como clave para ayudar a determinar cuándo y cómo aliviar las restricciones al movimiento y al comercio que han resultado en un cierre económico sin precedentes.
Conocer la verdadera extensión del alcance del virus puede arrojar una luz sobre cuán cerca está la población de lograr la inmunidad del grupo, en el que suficientes personas tienen cierto grado de inmunidad al virus que dificulta la propagación de las infecciones.
Dichas pruebas también pueden proporcionar una imagen más precisa de la letalidad del virus. En este momento, la tasa de mortalidad se basa en la cantidad de infecciones confirmadas, pero cuanto mayor sea el número de infecciones, menor será la tasa de mortandad.
Sobre la base de sus resultados, los investigadores de Stanford estimaron que la tasa de mortalidad en el condado de Santa Clara está entre 0.12% y 0.2%. En comparación, la tasa de mortalidad promedio de la gripe estacional es de 0.1%.
Sood dijo que era demasiado pronto para ofrecer recetas de políticas basadas en los primeros resultados, y señaló que un estudio adicional proporcionará más información sobre la tasa de mortalidad y la rapidez con que se propaga la enfermedad.
El objetivo en el condado de Los Ángeles es repetir el estudio cada dos o tres semanas en el transcurso de varios meses, con la esperanza de generar más datos para informar los modelos que los funcionarios públicos están utilizando para planificar su respuesta al coronavirus.
“Necesitamos poner esos datos en estos modelos y luego averiguar cuál es la conclusión”, indicó.
Los expertos de la Organización Mundial de la Salud advirtieron el viernes que es demasiado pronto para evaluar el grado en que las pruebas de anticuerpos indican inmunidad.
Maria Van Kerkhove, directora interina de enfermedades emergentes en la OMS, dijo que aún no hay evidencia de que las pruebas serológicas rápidas puedan revelar la inmunidad al coronavirus.
“En este momento no tenemos evidencia de que el uso de una prueba serológica pueda demostrar que un individuo es inmune o está protegido contra la reinfección”, señaló.
Las pruebas serológicas miden el nivel de anticuerpos contra el virus que el cuerpo crea una o dos semanas después de la infección, expuso.
Pero los científicos aún no saben si las personas que tienen anticuerpos contra el virus son inmunes.
“Vamos a emitir una orientación sobre esto durante el fin de semana porque es un área confusa”, dijo Van Kerkhove.
El Dr. Michael Ryan, director ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS, se hizo eco de su preocupación.
“Las personas deben analizar detenidamente la protección que los anticuerpos podrían brindar”, señaló. “Nadie está seguro de si alguien con anticuerpos se encuentra completamente protegido contra la exposición y contraer la enfermedad nuevamente”.
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